Bahía de Gijón
Cuantos días de mi vida;
niñez y juventud
ahora madurez;
me has visto jugar en tu arena
y nadar en tus aguas.
Partidos de futbol, tenis,
partidas de cartas.
Queimadas, escarceos, aventuras;
tristezas y alegrías
sufrimientos.
Siempre ahí esperando
dispuesta,
escuchando mis lamentos
mis planes y esperanzas
mis sueños y tormentos.
Siempre ahí,
esperando mis lágrimas
mis designios.
Siempre ahí,
redimiendo mis errores.
Nunca nadie como tú
celebrando mis glorias,
más bien pocas.
Gracias es decirte nada,
Bahía de Gijón
algún día, parte de mi ser
de mis cenizas
ojalá sean desposadas
con a tus arenas
dulces, suaves en tu calma,
bravías, en la tempestad de tus aguas
Tempestad
Calma
Poesía y Fotografía: Maximenendez